Unión eterna

Soy tranquilidad.

Vivo inmerso en apacible silencio.

Soy como un cubito de hielo al sol.

No hay nada que hacer, sólo ser.

Paz.

No hay cubito.

Inmensa paz.

No existe nada a tus espaldas

Sol tranquilo. Apacible día. Silencio y quietud.

¿Será el corazón un caramelo?

Tan dulce es...

El Amor es Dios

El Amor a Dios vive en el Momento eterno en el que no se ve ninguna cosa. Sólo se siente/vive a Sí mismo: Amor, Dios, Paz inmutable, Bondad intemporal.

Aquí hay un momento que dice: ¡Celébrame!

Fiesta de corazones fascinados, unidos en un solo corazón enamorado de sí mismo y de la alegría que es la hija la hermana y la madre de su propio ser; Fiesta de corazones celebrando unidos nuestro Único Propio Ser. Lo ilimitado celebra lo ilimitado, enamorado de un gozo infinito, un entusiasmo indescriptiblemente bello, una felicidad siempre creciente, siempre sonriente, siempre gozándose a sí misma.

Este momento lo contiene todo, lo comparte todo, es la Luz que desvanece toda sombra, la dulzura que desvanece todo amargor, la eternidad que desvanece el tiempo, lo infinito que desvanece lo limitado.

El chiste es reído, la dulzura brilla, el Amor es Amor, la Paz es Paz, todo unido, todo Uno, todo compartido, todo expandiéndose como Uno Total.

La rana nunca dijo «croac» sino que el Momento Ilimitado convirtió con su dulzor todo en princesas y príncipes, unidos todos en un Único Sol Resplandeciente que sonríe desde su Aventura Inmortal y gozando de su Infinitamente Eterna Alegría Ilimitada. No hay mayor Gozo que la Aventura del Ser, Ser, Ser, Ser, Ser...

¿Ser qué? Entonces no-ser. Pues no puede ser limitado. Pero... ¡qué no-ser más Dulce y qué Risueño que Es!

Notita, noticia, notando, anotando

No existe nada fuera de Ti.