El mundo de la multiplicidad es mentira; es ilusorio y nunca ha existido realmente.
Lo único que existe, desde siempre y para siempre, es tu Ser.
Y no hay nada más. No hay mundo, ni seres, ni vida, ni nada, excepto Tú, el Ser.
Olvida lo cambiante y fugaz,
y contempla únicamente la Majestad de lo eterno en tu infinita Mismidad,
que es el Uno, el Ser Único, la Totalidad y la Unidad,
en la cual compartes una misma esencia/vida/ser con todos los seres que ahora percibes
—aunados en unidad como Uno solo.
No hay nada más que este Uno-sin-segundo, el Ser-sin-forma,
la infinita plenitud, la satisfacción ilimitada,
la paz deslumbrante y la maravilla más allá de las palabras;
y Eso es lo que Eres.